El partido de izquierda Podemos (UE-Izquierda) acordó el viernes estar junto al nuevo partido de izquierda Sumar en las elecciones generales del 23 de julio en España, dijo la secretaria general de Podemos, Ione Belarra.

Sin embargo, advirtió que Podemos no aceptaría un veto contra la actual ministra de Igualdad, Irene Montero, que había sido objeto de fuertes críticas por el enfoque de SUmar. Este es uno de los principales puntos conflictivos para llegar a un acuerdo final, informó EFE, socio de EURACTIV.

Podemos, según Belarra, quiere un trato ‘justo’ con Sumar y eso no significa exclusiones. La coalición Podemos-Sumar se registrará esta tarde.

En un mensaje difundido por Canal Red, el canal de internet del exfundador de Podemos Pablo Iglesias, Belarra aseguró que la presidenta de Sumar, Yolanda Díaz, y su equipo habían vetado a Montero.

Además, Belarra aseguró el compromiso de unidad de Podemos, que la decisión estaba tomada y que la firma del partido en la coalición Sumar estaba «garantizada». Sin embargo, subrayó que el Partido Progresista, que fue derrotado por un estrecho margen en las elecciones regionales y locales del 28 de mayo, seguirá tratando de llegar a un acuerdo «justo» sin vetar a Montero.

También lamentó que la última candidatura del Equipo Sumar pueda resultar en que el partido ya no esté representado en el parlamento. “Nos parece injusto”, agregó Belarra.

Sumar registrará esta tarde la coalición con Podemos sin agotar el plazo de la medianoche de hoy -en cuanto Podemos confirme que quiere participar en la coalición-, dijo a Efe el equipo de Yolanda Díaz.

«Esperamos no tener que esperar hasta última hora» para registrar la coalición Podemos-Sumar -el plazo finaliza hoy (viernes) a las 00:00 horas-, pero «no aceptamos el veto en las negociaciones», ha apuntado Belarra. .

En un referéndum online el viernes, el 92,92% de los miembros de Podemos dio luz verde a la dirección del partido de izquierdas para decidir sobre la alianza con Sumar.

Ese es el peso que debe tener cada partido (Podemos, Sumar y otras pequeñas formaciones de izquierda). Además, se discuten los nombres en las listas, el poder territorial de cada partido, si la marca de cada partido aparecerá en la papeleta y el desarrollo del programa.

También se analiza si cada partido será autónomo dentro del grupo parlamentario, cuáles serán las estructuras de los grupos parlamentarios en las dos cámaras y cómo se distribuirán las ayudas públicas.