Los opositores a la energía nuclear han protestado nuevamente contra las entregas de uranio ruso frente a una fábrica de elementos combustibles en Lingen en Emsland. Un organizador dijo el jueves que de 20 a 25 personas asistieron a la vigilia. La protesta en Lingen está dirigida contra las importaciones pasadas y previstas de uranio de Rusia y, en general, contra el funcionamiento de la planta de elementos combustibles de Lingen, para la cual aún no hay límite de tiempo, anunció la ‘Asociación Federal de Iniciativas Ciudadanas para la Protección del Medio Ambiente (BBU)’ .

Recién a finales de septiembre llegó a la planta un cargamento de uranio procedente de Rusia, según datos publicados posteriormente por la Oficina Federal para la Seguridad de la Gestión de Residuos Nucleares (BASE). No existe una prohibición de la UE sobre las importaciones de combustible nuclear de Rusia, al igual que ocurre con el gas.

El pasado 7 de noviembre se volvió a aprobar para territorio soberano alemán una licencia para el transporte de elementos combustibles no irradiados desde la planta de Lingen hasta Kazajstán, según anunció BASE en su página web. Cuando se realice un transporte específicamente autorizado, es responsabilidad de la respectiva empresa de transporte en coordinación con las autoridades de control y seguridad correspondientes de los gobiernos federal y estatal. La información del horario de transporte no se pudo divulgar con anticipación por razones de seguridad.

Según información de ambientalistas, el carguero ruso «Mikhail Dudin» se encuentra en ruta desde San Petersburgo y tiene como posible puerto de destino a Róterdam. Las organizaciones ecologistas de los Países Bajos, Alemania y Rusia temen que el uranio enriquecido de Rusia para la planta de elementos combustibles de Lingen pueda volver a enviarse.

El asunto con el grupo del Kremlin Rosatom fue cínico y una bofetada para la población que sufre en Ucrania, dijo la BBU. El primer ministro de Baja Sajonia, Stephan Weil (SPD), y la viceprimera ministra Julia Hamburg (Verdes) deben instar al canciller Olaf Scholz (SPD) y a la ministra federal de Medio Ambiente, Steffi Lemke (Verdes), a actuar. “Estamos presionando para detener las importaciones de uranio de Rusia a la planta de elementos combustibles de Lingen”, dice el acuerdo de coalición del nuevo gobierno rojo-verde en Hannover.

Los elementos combustibles para la generación de energía nuclear en Europa se fabrican en Lingen desde hace más de 40 años. La planta de elementos combustibles pertenece a la empresa francesa Framatome. En particular, abastece a centrales nucleares en Bélgica, Francia, Suiza, Países Bajos, Gran Bretaña, España, Suecia y Finlandia.

La vigilia fue debidamente registrada por activistas ambientales, dijo una portavoz de la policía. La portavoz no hizo comentarios sobre posibles entregas o transporte de combustible nuclear.